miércoles, 24 de diciembre de 2014

Aire

Acarició su espalda, fundidos en un abrazo largo, cálido. Luego, se separaron lentamente. Besó su frente. En un segundo recordó el primer abrazo, la primera caricia. El primer sentimiento de vacío en el universo, de única compañía.
Y la besó.
Cuando estuvo solo en su habitación, la vida fue nuevamente historias imaginarias, fuentes de la juventud, arco iris llenos de elfos, canciones interminables.
Y ahí la abandonó. Como la canción más perfecta, inolvidable.
El aire que siempre quiso respirar.

lunes, 24 de noviembre de 2014

La espera

Mirando los pedazos de viento tocar las estrellas
el polvo de sonrisas y regresos tibios en el tiempo
tus manos son girasoles volando por el firmamento
y tus labios mi luna llena, mi cuarto menguante, mi crepúsculo.

Yo no vivo en las constelaciones
pero mi voz calla tus canciones, tus amaneceres, tus minutos y segundos
se cierran los silencios que nunca tuvimos
y las noches tocando nuestro pasado, nuestro destino en las nubes
las caricaturas de un solo color.

Y miro tu rostro.

Nosotros somos un trazo en la arena que la marea no va a borrar.

Por eso te espero.
(sueño silente en dos dimensiones: la nuestra)

jueves, 30 de octubre de 2014

Ojalá

Las nubes ocultaron el sol. Vaya, la primavera tiene delirios de grandeza, roba suspiros de cualquier arlequín, de cualquier distraído que se pierde entre estas estrechas calles. Yo me siento al lado del camino, en las gradas. Observo las palomas pasar a mi lado, el atardecer, las miradas extrañas, las quimeras.
Y me acuerdo de tu voz. Y tu ausencia.
Ojalá alguna de estas personas tuviera tu rostro. Ojalá estuvieras aquí.

lunes, 27 de octubre de 2014

Alguien

«Alguien pensando en ti mientras tu mente está en otro lado. Alguien tocando tu piel y no lo sientes, besando tus ojos, escribiendo tus canciones. Alguien jugando con el tiempo, siguiendo el rol que solía ser: compañía, confidente, abrazo oportuno, vida. Alguien escuchando en silencio, observando tus pupilas.
Y detrás de ellas sigues siendo tú.
Alguien, y tú sabes quién».

miércoles, 1 de octubre de 2014

Cuenta regresiva

Siguió el camino trazado por el silencio. El laberinto se volvió un juego de palabras, un anagrama acumulando letras, minutos, estaciones.
Tu rostro no es el mismo, tampoco tus labios.
Ahora no solo juegas con el viento, juegas a olvidar recuerdos, a lagunas mentales en una maraña de pasos, de sombras.
Y yo a tu lado, buscando escribir tu nombre en el aire, dibujando cada letra en esta noche sin estrellas.
Para no olvidarte jamás.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Vuelve

Mirar la luna llena como ejercicio diario, casi inútil. La hora, cerca de las diez, el camino el mismo. Viento, personas dispersas, como rompecabezas sin terminar, como bancas abandonadas, una tras otra. "Tus ojos en mi mente". Cerrarlos es tonto, siempre estás en cada rostro, en cada respirar, tú caminas los mismos rumbos y yo no puedo tomar tu mano.
"Deja de soñar, pisa tierra".
Entonces detengo la marcha. Miro hacia atrás. Eres la misma niña linda entre mis brazos, recorriendo tus labios, respirando tu aliento.
"Pisar tierra".
Y te extraño. Me pierdo entre mi propio laberinto de palabras, de ideas sin terminar, de adioses inmensos, de sueños partidos por la mitad. De tu mirada enredada en mi cerebro como fotografías interminables, hermosas.
"Vuelve". Vuelve.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Al lado del camino

Veo tus fotografías
eres más real que el oxígeno, que la sangre corriendo por mi venas
escucho tus palabras pero no puedo tocarte
los días son oscuros sin tus pupilas, no puedo caminar.
Sin ti, el mundo es un inmenso invierno
y yo una baldosa más en este sendero sin fin
si pudiera detener el tiempo y tenerte en mis brazos
perderme otra vez en tu cabello, fundirme en tus labios
tomarte de la mano, verte sonreír
[vivir al lado del camino, oh mujer hermosa]
escribirte poemas de amor, por siempre.

sábado, 16 de agosto de 2014

Regresar

«Y si pudiera regresar en el tiempo creo que volvería a esa última noche juntos. Al despedirnos no te diría adiós y continuaría mi vida como lo hice, te diría cometí muchos errores pero no quiero que te vayas sin decirte que eres la única persona que me entiende. Por eso, no quiero apartarme de tu lado. Te necesito porque te quiero».

viernes, 15 de agosto de 2014

Voces, miradas

Tu silencio en medio de mi soledad
tu respiración del otro lado de la línea
la noche es larga para escribir poemas de amor
por eso cuento cada una de las estrellas para colocarlas en tu cabello
dibujar tu rostro en el viento, delinearlo
buscar las palabras precisas para poder tocar tus labios
ocultando el dolor tras mis pupilas
y poder tomar tus manos, escribir el final de mi historia.

No somos los mismos, pero aún sonrío al ver tus pasos breves
aún puedo imaginar historias que jamás hemos vivido juntos
recordar que somos nosotros los que desafiamos al tiempo
caminando de la mano en un ocaso, en un infinito de palabras
hablando sin hablar, sintiéndonos sin estar cerca
como invierno soplando cada uno de nuestros momentos,
ocultando los rastros, buscándote con desesperación.

Y escribo en la arena, oh reina escarlata, oh estrella fugaz atravesando mi espacio en blanco:
"mi voz solo existe para pronunciar tu nombre"
Vuelve. No puedo vivir sin ti.


miércoles, 13 de agosto de 2014

Los días sin ti

Un día más. La noche se hace larga cuando tú estás en mis pensamientos. Cuando los recuerdos no dejan pasar las páginas y el tiempo parece detenerse.
El tiempo. Los recuerdos.
Nuestros momentos son ahora cenizas al viento, estaciones sucediéndose una tras otra en un agujero negro. Y sin embargo, tengo tu rostro cuadro a cuadro, como fotograma ambiguo, llevándote impregnada en el fondo de mi alma.
[En mis fantasías aún me hablar, seria, feliz, nerviosa, pero aún lo haces]
Tocar tu corazón es viajar al pasado, como cuando solía hablarte sin decir palabras, sin estar en el mismo lugar.
No puedo estar sin ti. Soy como un lobo herido aullando a la luna llena, vagando errante, buscando su hogar. Buscando tu voz.
Vuelve.

miércoles, 6 de agosto de 2014

Tú y yo

Tú y yo caminando por las mismas calles, divisando mañanas, tardes, noches, madrugadas, nosotros tomándonos de las manos, contando los segundos, respirando del mismo aire, imaginando recuerdos en nuestras mentes. Escribiendo en las nubes, sentados en las mismas bancas de los mismos parques, mirando el mar en todas las estaciones, desde arriba, desde abajo, lanzando piedras, mirando el horizonte naranja, azul, púrpura.
Nosotros dos en diferentes lugares pero con el mismo pensamiento, muriendo por escuchar nuestras voces, acumulando fotografías, viendo el paso del tiempo en el hombro del otro, en las líneas de nuestras palmas, en el sabor de nuestros labios, en el movimiento de nuestros cuerpos.
Nosotros luchando contra las manecillas del reloj. Contra nuestros propios fantasmas. Contra el adiós.
Y ahora, existes en mi silencio. En el reflejo de mi rostro en las mismas calles que solíamos caminar juntos, en los espacios que llenabas con tu sonrisa. En el viento, en la brisa, en la soledad. En la lucha incansable por no acabar con el universo que habíamos construido.
Y que puede seguir construyéndose. Tú y yo.

martes, 5 de agosto de 2014

Lo que no vas a leer

Miré tu rostro, aún eran tus pupilas, tu sonrisa
recordamos como vivir
en un breve respiro retrocedí varias estaciones
tus palabras, tu voz, nuestros sueños
la primera vez que pude tocarte.
Cuando descubrí tus labios, el camino oculto hacia la felicidad.

Y te miro.
Tus palabras quedaron atrapadas en el tiempo
tus manos siguen siendo suaves, tu cabello aún quema mi piel
luego, la noche se cierra con un adiós
[en mis fantasías, todas nuestras imágenes se repiten una y otra vez, como bucle sin fin]
y observo nuevamente tu rostro
la soledad es un horizonte infinito donde no existe tu voz. Ni tu mirada.

Y aún te espero.

[te he buscado tanto y hoy sé, que no hay nadie más]

sábado, 2 de agosto de 2014

Llévame

Tus ojos acompañándome en la brisa, en este inconsciente viaje al pasado
estás en ese intervalo irreal, donde nuestro idioma no es el mismo
donde tu mirada traza nuestros nombres en la arena
yo acaricio tu rostro con ambas manos,
entonces beso tus labios en una nebulosa gris, en un mundo paralelo
eres reflejo perfecto, sol radiante, calles que suben, luces de colores
eres un cielo celeste, un inmenso crepúsculo de palabras.
Un puñado de fotografías. Oxígeno que quiero respirar.

Y despierto.

Llévame contigo en tus acuarelas, en tus viajes en el tiempo.
Como juntando las manos en un silencio perfecto.
Apartados del mundo. Juntos.

Juntos.

miércoles, 16 de julio de 2014

Jamás

Miró su rostro. Había olvidado como sonreír. Por eso la acarició, como trazando una línea imaginaria con sus dedos, lento, con ternura. Como escribiendo una nueva historia de papel, de cuatro líneas. La gente transita indolente como en cámara lenta, como congelados en el tiempo. Ella termina de sonreír. Le recuerda que sus caminos no son los mismos. Y él mirando sus pupilas, como crepúsculo, como océano en su fin. (en su fantasía, ella no suelta su mano, jamás)

jueves, 29 de mayo de 2014

Blanco y negro

Vaya, el atardecer tardío algunas sombras en la calle, viento atravesar el mismo parque, divisar las mismas sombras los árboles extraviados, mudos ante tantos recuerdos [recuerdos cavando zanjas a cada paso, escribiéndose a sí mismos como canciones sin fin] Me detengo. Tu mirada fría, tu voz en el espacio, tus pasos largos tu ausencia [en mis sueños, eres como una estrella, tu brillo no disminuye sino aumenta a cada mirada, estás en todas partes]. Le escribo a tu ausencia. Mientras tanto, sigo mi ruta sin pensar; la vida es una fotografía en blanco y negro y nosotros, nos estamos quedando perdidos en el tiempo.

jueves, 8 de mayo de 2014

Resucitar

"Yo era un tipo valiente", canta el trovador mientras los árboles se suceden uno a otro, "valiente", en realidad nunca lo fui, pero sí temo quedarme solo todo el mes de noviembre y espero en medio del frío, viendo autos, brisas que van como fugitivos otoño en mis venas tocando apenas mi cabello, susurrando al oído: "ahora enfrento tu ausencia..." y en eso tú, la misma mirada de niña, los ojos marrones clavándose en los míos, la misma figura, la misma dulzura. Dicen que existen historias sin final, que son escritas por el tiempo. El tiempo es una avenida que para mí está vacía, llena de recuerdos, llena de tu voz. Y lo recorro lento, mientras aún quedan vestigios de tu suave despedida. Las despedidas que no tienen fin. [no lo permitas]